La noche del lunes 17 de junio, un colapso eléctrico generó un apagón masivo que dejó sin luz a cientos de hogares y sectores clave de la ciudad. La operadora Air-e, bajo intervención por parte del Gobierno desde septiembre de 2024 y en proceso de liquidación, con deudas superiores a los $1,1 billones (según el gremio, superan los $1,5 billones), describió el incidente como un ‘evento técnico’ en seis subestaciones: Riomar, Centro, Silencio, Las Flores, Oasis y Puerta de Oro.
Sin explicación, así permanece uno de los eventos que causó caos en la principal ciudad de la región Caribe, seis subestaciones colapsaron y media ciudad quedó a oscuras, generando preocupación y un enorme temor entre el sector energético.
La interrupción, que se produjo alrededor de las 6:57 p.m, afectó tanto a zonas residenciales como a importantes nodos de movilidad y comercio. La falta de luz apagó semáforos, generando caos vehicular y obligando a la intervención de la Policía de Tránsito.
El Centro fue uno de los principales sectores afectados y algunos de los locales debieron cerrar más temprano de lo habitual.
A medida que avanzaba el tiempo, también avanzaba Air-e Intervenida, hacia las 8:16 habían logrado encender las subestaciones Centro y Silencio, pero aún quedaban cuatro fuera de servicio, la situación fue tan apremiante que la Superintendencia de Servicios Públicos envió personal para apoyar las labores de los técnicos.
Ante la emergencia, el alcalde Alejandro Char recurrió a su cuenta en X para exigir una solución inmediata: “¡Pilas!”, se dirigió a Air-e a actuar con rapidez. Hacia las 8:24 p.m, la empresa informó que se había restablecido el servicio en dos subestaciones (Centro y Silencio), beneficiando a cerca de 109.559 clientes. Sin embargo, el restablecimiento total tomó casi dos horas más, según medios locales.
Hacia las 10:19 ya se tenía bajo control la situación y la empresa informó, “las maniobras técnicas dieron resultados positivos en la normalización del servicio. En la subestación Riomar, los circuitos Solymar, Altamira, Buenavista y Andalucía ya se encuentran en operación normal. En la subestación Oasis, también se han restablecido los circuitos Concepción, Santa Ana, Surisalcedo, Oasis 12, Modelo y Porvenir”.
Con estas acciones, todas las subestaciones afectadas quedaron restablecidas y funcionando de manera óptima, pero, en el aire quedó la gran pregunta: ¿Qué Pasó?
Más allá del apagón: problemas estructurales en Air-e
Este evento no se reduce a una falla puntual. Air-e lleva meses bajo intervención estatal, sin avances significativos en su modernización. La Superintendencia de Servicios Públicos (Superservicios) ha enviado apoyo técnico, pero aún no se definen las causas de fondo. El pedido de un “salvavidas financiero” al Gobierno, sin fecha de resolución pública, subraya que la operadora enfrenta una crisis que amenaza su capacidad operativa.
Expertos advierten que sin inversión en infraestructura, refuerzo de subestaciones, mantenimiento preventivo, y capacitación técnica, Barranquilla seguirá expuesta a apagones recurrentes. Además, la credibilidad de Air-e y la confianza ciudadana están en juego.
Conclusión crítica
Aunque el restablecimiento eventual del servicio alivió la emergencia, la situación pone en evidencia la fragilidad del sistema eléctrico en la región Caribe. La intervención estatal y los recursos urgentes no han sido suficientes para transformar a Air-e en una operadora robusta. El apagón debe servir como alerta para abordar, con transparencia y urgencia:
- La auditoría de la gestión de Air-e durante su intervención.
- Inversiones en modernización del sistema eléctrico.
- Establecimiento de protocolos más eficaces de comunicación con usuarios y autoridades.
- Estrategias preventivas que impidan que una falla técnica ocasional se convierta en crisis social.
No es coincidencia que hace dos días la empresa lanzara una campaña para que los usuarios ahorraran energía, lo que hace pensar que ya tenían en su radar la posibilidad de una sobrecarga en los circuitos que generarían un apagón masivo, como efectivamente ocurrió.